lunes, 27 de julio de 2009

ALGUNAS COSAS ANTES DE QUE ACABE JULIO

1-El consejo General el Poder Judicial CGPJ ha emitido dos informes a propósito de la ley de interrupción del embarazo, ambos apuntan en sentidos opuestos. Como órgano consultivo, no vinculante, para el gobierno ha servido de poca ayuda, cuando lo que se le pedía era comprobar si el proyecto de ley estaba de acuerdo o no con la Constitución. Los dictámenes emitidos demuestran que prevalecen los criterios morales, más que los puramente técnicos. Es verdad que no podemos dividirnos a la hora de opinar o de emitir juicios, estamos, todos y cada uno de nosotros, mediados como sujetos por muchas razones, pero es deseable que prevalezcan los criterios técnicos, que es lo que se pide.

2- El barómetro de julio del Centro de investigaciones sociológicas, CIS, le da cierta ventaja al Partido Popular, PP frente al Partido Socialista Obrero Español, PSOE, si celebraran ahora elecciones. Lo apretado de la previsión creo que está, entre otras razones, en la que está cayendo en ambos bandos. Llueve de distintas manera, pero llueve en ambos campos.

3- Seguimos con la gripe y cada día en un lugar distinto se ponen en cuarentena personas que la padecen. Dicen que lo peor está por llegar. Hay que vender el “Tamiflú”.

4- Julio está quemando los últimos cartuchos y los turistas que se resisten a venir a Canarias. Los ingleses, alemanes, holandeses… se quedan en casa y ponen el ventilador, mientras doña Rita, nuestra consejera autonómica de turismo no se explica que con la campaña tan bonita que hizo en China no venga ninguno al sur, sino a la calle de la Noria a poner un kiosco para vender los gatos de la suerte. Ya ha pedido la guía telefónica de China, toda ella, para llamar uno a uno a ver por qué no vienen a Tenerife. Seguro que Bermúdez tiene algo que ver porque él prefiere a los rusos, y ya se sabe...

5- Al ministro de exteriores, Miguel Ángel Moratinos, hay que darle una paga extra y un retiro en un balneario después de la gira que le ha llevado por Gibraltar, Guinea Ecuatorial y ahora Venezuela. Si recala en Cuba en el balneario va a tener que estar dos semanas, por lo menos. Soportar lo que está soportando tiene que desquiciar a cualquiera.

6- Tengo la impresión que la multinacional de prendas deportivas ADIDAS, ha despedido a Fidel Castro. Hace algunos meses que no aparece con un chándal nuevo. ¿Habrán contratado a otro ilustre?

7- Cuando Trinidad Jiménez se vio con el cargo de ministra de sanidad, seguro que pensó: “esto está hecho”, poca cosa, pocas competencias, por tanto pocos sobresaltos, pero hete aquí que se encuentra con una pandemia como en plena edad media. Con una pandemia y que cada comunidad puede gestionar como mejor le convenga, porque no hay ningún órgano con competencias en todo el territorio nacional para hacer frente a un caso como éste. Espero que la gripe sea lo más democrática posible, bueno su gestión y no haya medidas para ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda.

Recuerden que la Unidad militar de Emergencias UME, se creó, entre cosas, porque el Estado central carecía de competencias sobre la materia de catástrofes.

8- Los menores, la ley la impunidad, según algunos, de los jóvenes, han dado mucho de sí este final de julio. Hechos excepcionales, algunos los aprovechan, para hacernos ver que son hechos cotidianos y de paso crear el tópico de que los jóvenes van camino a la perdición (esto es tan viejo como casi andar de pie) y aprovechan los hechos, excepcionales, para intentar endurecer las leyes, hacerlas más punitivas, más represivas. No nos olvidemos que los jóvenes de ahora, como lo de otros momentos de la historia, tienen en los adultos con los que conviven un modelo de vida y de comportamiento con una escala de valores que les viene dada. Los jóvenes no lo son por generación espontánea, están y forman parte de una sociedad donde los adultos tienen mucho que decir.

Se me olvidaba, no cuenten conmigo para endurecer leyes contra los jóvenes. Esa no es una solución.

jueves, 23 de julio de 2009

A PROPÓSITO DE BENJAMÍN HARRIS

Mientras leo sin hacerlo de forma premeditada surgen relaciones entre el texto que en ese momento tengo en las manos y cosas que he leído. Es un ejercicio de divagación que en ocasiones me abstrae de tal manera que dejo lo que estoy leyendo para confirmar aquello en lo que estaba me ha servido de enlace con cualquier otro texto. Pongo un ejemplo y seguro que queda más claro. En este caso hay tres elementos concomitantes, por un lado el texto de Benjamín Harris, Recuerdos de este fusilero, Reino de Ronda, 2008, que ya he comentado en alguna entrada anterior; un poema de Octavio Paz (1914-1998), Razones para morir y las noticias de los últimos días sobre la visita de Moratinos al Peñón de Gibraltar. Sí, puede resultar extraño este conjunto, pero el elemento que circula por los tres es el patriotismo, no sé si yo tendré de eso que se llama patriotismo, pero Benjamín Harris sí que lo tenía y le servía, creo, para superar las facultades cotidianas, la supervivencia, entre otras. Octavio Paz en el poema citado tampoco parece que transpire patriotismo, me da la impresión que le queda muy lejos, por lo menos lo que podría ser ese patriotismo rancio y visceral al que se agarran muchos en este país y que cuando Moratinos se va a Gibraltar se desatan todas las iras contenidas y lo acusan de “traidor”, que no sé si será más o menos patriota, pero esa visita lo que hace es poner fin a un anacronismo estúpido.

Decía que yo no sé si tengo eso que llamamos patriotismo, porque no me emocionan las banderas, tampoco los triunfos deportivos de otros españoles, son triunfos individuales y así los veo, nunca como algo colectivo o representativo; me emociona que el Tenerife suba a la primera división de fútbol porque sé que a personas a las que quiero mucho se van a sentir un poco más felices, pero poco más, así que parece ser que soy un descastado sin sentimientos patrióticos y lo que es peor insensible a la celebración colectiva de hechos individuales. Bueno cargaré con defectos, éste es uno confesable.

Les dejo con el poema de Octavio Paz que lo dice muy bien. Que lo disfruten.

Unos me hablaban de la patria.
Mas yo pensaba en una tierra pobre,
pueblo de polvo y luz,
y una calle y un muro
y un hombre silencioso junto al muro.
Y aquellas piedras bajo el sol del páramo
y la luz que en el río se desnuda...
olvidos que alimentan la memoria,
que ni nos pertenecen ni llamamos,
sueños del sueño, súbitas presencias
con las que el tiempo dice que no somos,
que es él quien se recuerda y él quien sueña.

No hay patria, hay tierra, imágenes de tierra,
polvo y luz en el tiempo...

OTRAS LECTURAS: RECUERDOS DE ESTE FUSILERO

Entre las cosas que he leído últimamente me ha llamado mucho la atención, Recuerdos de este fusilero. Benjamín Harris; Reino de Ronda, 2008. Benjamín Harris (1781-1858), zapatero queda enrolado en el 95º Regimiento de fusileros, regimiento que formaba parte del ejército de Lord Wellington, que participó activamente en la Guerra de Independencia española en los años 1808-09. En Inglaterra era más conocida como la Guerra Peninsular, y en sentido más extenso este episodio en la Península forma parte de las Guerras Napoleónicas.

Harris, analfabeto, contó sus experiencias en el ejército, su vida como artesano que con su oficio de zapatero no podía salir de la pobreza a un capitán retirado, su amanuense que es quien le daría forma de relato, y lo que ha llegado hasta nosotros. No conozco nada aparecido, por su contenido, por la óptica desde la que se visualiza el conflicto bélico, por las razones por las que se lucha, el patriotismo… no olvidemos que es un soldado raso, fusilero, que viene a ser la punta de lanza, la avanzadilla al entrar en la batalla; además de zapatero de su regimiento, lo que le da un papel significativo dentro de la unidad.

La dureza de las marchas a pie acompañadas de una alimentación escasa, lo pesado del equipo, la estricta disciplina, arbitraria en muchos casos, las descripciones y detalles que narra en los momentos en los que entra en combate, lo que siente cuando ver caer a sus compañeros son el núcleo del relato. Este conjunto de vivencias que se caracterizan por el sufrimiento tienen un soporte que va más allá de la supervivencia y es una especie de patriotismo del que echa mano, o mejor echan mano quienes como él están enfrascados en un conflicto sin tener todas las claves del mismo. Sólo ese patriotismo y el instinto de supervivencia pueden explicar la superación de los acontecimientos que vive.

No busquen en el texto de Harris estrategias militares o explicaciones política a los conflictos en los que participa, los británicos luchando contra los franceses en la Península, no busquen nada de esto porque no lo encontrarán, sólo leerán lo que podríamos llamar la “épica del pequeño”, del que tiene que sobrevivir en lo cotidiano, el comer, el esconder la cabeza para que no se la vuelen de un disparo, el llevar un equipo incómodo y muy pesado que continuamente pone a prueba su capacidad de sufrimiento en marchas extenuantes. Recomendable. Les dejo con algunos párrafos, que espero sean interesantes.

«Los Fusileros siempre éramos los primeros en desembarcar, porque, de hecho, siempre formábamos la vanguardia al avanzar y la retaguardia en las retiradas. Como los antiguos nativos de Kent, exigíamos por derecho el puesto de honor en el campo de batalla. [...] Ni el calor del ardiente sol, ni las largas millas, ni las pesadas mochilas, pudieron domeñar nuestro ardor.

[...] Era una visión gloriosa la de nuestras banderas desplegadas al viento en aquellos campos. Los soldados parecían invencibles: nada, pensaba yo, hubiese podido derrotarlos. Con decir que, nada más que en los Fusileros, contábamos con algunos de los hombres más duros que hubiesen luchado nunca bajo el sol ardiente en tierra enemiga. Pero viví para ver cómo las penalidades y la fatiga acababan con cientos de ellos antes de que hubiesen pasado unas pocas semanas.

[...] En la retirada de Salamanca recuerdo haber visto caer a muchos hombres. Entonces se trataba ya prácticamente de un “sálvese quien pueda”. Aquellos cuyas fuerzas empezaban a fallarles no miraban ni a izquierda ni a derecha, sino que, con los ojos vidriosos, seguían adelante, tambaleándose, como buenamente podían.

[...] Tras la desastrosa retirada a La Coruña, los Fusileros habíamos quedado reducidos a una sombra enfermiza, si se me permite el término. Mi compañía, de cerca de un centenar de hombres, no contaba ya sino tres

Del texto de BENJAMIN HARRIS

martes, 21 de julio de 2009

CASI FINIQUITANDO JULIO

Pues nada, ya estamos finiquitando el mes de julio y seguimos con las novedades como prolongación de la primavera. No cede la actualidad para aletargarnos con el calor y tumbarnos a la sombra de un pino verde o de una tapia que dé algo de sombra. Mientras espero a que amaine un poco el viento y tumbado en la arena de la playa de Güímar repaso mentalmente lo que llevamos de este mes de julio, después de haberlo doblado, algunas cosas no cambian.

En el Puerto de la Cruz a Lola Padrón alcaldesa del Partido Socialista Obrero Español PSOE, le quieren preparar las maletas con una moción de censura, porque después de casi dos años co-gobernando con el Partido Popular PP, sí, han leído bien, ya no da más de sí la aventura de estas dos formaciones, que ligan como el aceite y vinagre en una ensalada, y tienen que terminar con esta farsa. Eva Navarro, mujer fuerte del PP en el Puerto, se marcha para que su partido y Coalición Canaria lleguen a un pacto, esto pega más y como lo saben hacer les saldrá algo como el gobierno de Canarias. Eva, no la del pecado, para marcharse hay que asegurarle un “puestito”, algo que cubra sus expectativas de dirigente política y al final de mes se vea “desahogadita”, económicamente hablando, que somos humanos y al fin todos tenemos necesidades…

En Santa Cruz más de lo mismo; algunos vecinos y pocos usuarios de la playa de Valleseco se metieron en la charca de la plaza de España. La repercusión de la manifestación en la ciudad: nula, porque los partidos políticos con representación en el ayuntamiento de la capital estaban en las romerías o quién sabe dónde, allí no estaban ni se les esperaba.

El parque marítimo cerrado, Las Teresitas igual o peor cada verano. Como no le dan una banderita azul, el alcalde va a pedir prestada la de Las Canteras en Las Palmas, con el permiso de Pepe Rodríguez, como no.

En informe del consejo económico y social de Canarias (CES), entretenido como siempre, más o menos como una guía de teléfonos y lleno de recomendaciones “tirones de oreja” para los que gobiernan y los que hacen oposición, que en alguna ocasión falta les hace.

A Ángel Llanos, concejal del PP en Santa Cruz y “general-alcalde”, no teniente-alcalde, al que engañan con la vuelta en el kiosco de la esquina cuando va a comprar la hoja parroquial y el paquete de pipas, le han salido mal las cuentas con el Cabildo. El tío Ricardo, que es el dueño del Cabildo no le ha hecho gracia y se lo ha llevado al juzgado. Creo que deberíamos hacer una ONG para enseñar a Ángel Llanos a restar.

A Ángel Isidro Guimerá no le gustan los tatuajes, ni los que lo llevan. Hace una ecuación sencilla: tatuajes= drogas; vale Guimerá=whisky? Tampoco es que tenga importancia, porque lo dice él, pero es un poco “faltón”. Lo confieso, de Guimerá siempre me ha llamado la atención su bronceado. Parece el anuncio, antiguo, de Coppertone.

Como los días de calor parece que van en aumento la hoja parroquial de El Día va subir la tensión soberanista en los próximos fines de semana. Hoy leí (El Día) en un bar: La independencia llegará de oficio”. Yo pensé que de oficio llegaba la devolución de Hacienda o las multas de tráfico.

En fin habrá más cosas pero no tengo más ganas de escribir, hace mucho calor y me temo que el mismo me lleve a cometer alguna locura, por ejemplo suscribirme a El Día. No se rían el calor hace estragos.

De la ley del Menor, mejor dejarlo porque están los ánimos…, que cabalgan. ¡Qué duro tiene que ser joven!

CUARENTA AÑOS Y UN DÍA

Pues sí, ya han pasado cuarenta años y un día. Suena como las sentencias que hemos oído en las películas. Cuarenta años y un día han transcurrido desde que el hombre puso un pie en la luna, y todos los medios de comunicación han hecho un alarde, un esfuerzo para recordar tal acontecimiento, incluso los “negacionistas” han desgranado sus argumentos a favor de su tesis. Jesús Hermida y Cirilo Rodríguez han vuelto a prestar sus voces para acercarnos aquel momento. La pena es que la voz de América, Walter Conkrite (el hombre que no tuvo palabras para narrar el hecho y sólo pudo emitir una exclamación), no llegara a ver este cuadragésimo aniversario.

La historia del alunizaje también ha servido para que las personas que lo vivieron, en aquel entonces tenía quince años cumplidos cinco días antes, hagan de esa efemérides un hito importante y recuerden el día con una precisión y con una cantidad de detalles que casi asustan, porque dan a entender que cuentan con una memoria prodigiosa. La verdad es que la imaginación amolda los recuerdos y los coloca y adorna como mejor nos conviene, es casi normal, pero aún así en estos días he leído auténticos ejercicios literarios intentando narrar los recuerdos de ese día. No les voy a castigar con mi relato, porque la verdad con quince años recién cumplidos, con la escasez de medios con los que se contaba en aquel momento y que creo que los jóvenes, quienes teníamos esa edad más o menos, llegáramos a ver la auténtica trascendencia del hecho y el valor político de un gesto tan importante en la carrera espacial, sin embargo, reitero, las descripciones de ese día tienen el detalle de una fotografía de alta resolución.

En fin que me quedo como un simple espectador que recuerda aquel día, aquel momento de forma muy vaga, imprecisa, salvo que una vecina, doña Isabel y su marido don Ciro negaban la llegada a la luna, sin argumentos, pero lo negaban de forma vehemente. Fíjate por donde me he acordado de doña Isabel y don Ciro.