jueves, 25 de agosto de 2011

LECTURAS: HONRARÁS A TU PADRE. GAY TALESE


Con cuarenta años de retraso llega la traducción en castellano de Honrarás a tu padre del escritor y periodista Gay Talese, publicado por Alfaguara. El tiempo transcurrido ha erosionado el contenido de esta obra casi monumental porque el cine y la televisión han tenido mucha culpa. Me explicaré.
            El trabajo de investigación de Talese en esta obra sobre las actividades de la familia Bonano en Nueva York, nos lleva a la trastienda y a conocer los entresijos de una organización mafiosa como era esa familia. El trabajo de Talese no se queda en la mera descripción de esas actividades como el juego, la prostitución, “impuestos” por protección, drogas y todo un conjunto de figuras delictivas que generaban pingües beneficios, sino que en un ejercicio de análisis exhaustivo profundiza en ellas, poniendo luz, allí donde a la Justicia americana le gustaría ver. De igual manera lo hace con otros aspectos como la vida familiar, las relaciones con otros grupos mafiosos, los códigos de conducta, los valores que modelan a personajes como Joseph Bonano, o su hijo Bill, eje de esta obra y con quien Talese mantuvo una estrecha amistad después de años de contactos para elaborar esta obra.
            Creo que Talese consigue que lo podría ser un frío y distante trabajo de investigación periodística se convierta casi en una novela, así se puede leer, y esto no es demérito del resultado, sino todo lo contrario; como lector se agradece esta proximidad a la historia, casi familiaridad (Vemos crecer a los hijos de Bill Bonano y eso se nos coloca en una posición muy cercana, porque son los problemas que afronta cualquier familia).
            Decía que el cine y la televisión le han hecho muescas a esta obra porque para quienes hemos seguido la trilogía de El Padrino, Francis Ford Coppola; 1972, 1974 y 1990; las seis temporadas de Los Soprano o alguna que otra película como Uno de los nuestros, Martin Scorsese; 1990, por ejemplo, la lectura de Honrarás a tu padre tiene muchas claves ya desveladas porque directores y guionistas han bebido en esta obra que digo llega, en castellano un poco tarde. Es evidente que esto no le resta valor, ni interés, pero cuando imaginas a los Bonano y quienes le siguen o trabajan a sus órdenes te acuerdas de algunos de los personajes que aparecen en Los Soprano o cualquiera de las películas citadas.
            Solo me queda dejarles algunos párrafos por si tienen la curiosidad de leer esta obra, recomendable. Espero que sean interesantes.

            “Aunque Guliano era un héroe en oeste de Sicilia, en cualquier otra parte fácilmente podrá ser visto como un ladrón común; todo dependía en gran medida del punto de vista, y lo mismo se aplicaba cuando se juzgaba la vida de cualquier hombre, las actividades de cualquier grupo, las políticas de cualquier nación. Si Bill Bonano había aprendido algo después de leer las memorias de grandes estadistas y generales, era que la frontera entre lo correcto y lo incorrecto, lo moral y lo inmoral, era con frecuencia muy tenue y que el veredicto final siempre lo escribían los triunfadores. Cuando Bill entró al campamento del Cuerpo de Entrenamiento de Oficiales de la Reserva, y más tarde al servicio militar en las Reservas del Ejército, fue entrenado en la técnica de matar legalmente. Aprendió a usar una bayoneta, cómo disparar un rifle M-1, cómo ajustar el telémetro del cañón de un tanque Patton. Aprendió de memoria el código militar de los Estados Unidos, que en principio no era muy distinto del de la Mafia, con su énfasis en el honor, la obediencia y el silencio en caso de ser capturados. Y si hubiera ido a combatir en el frente y hubiera matado a varios norcoreanos o chinos comunistas, se habría convertido en un héroe. Pero si mataba a uno de los enemigos de su padre en una guerra de la Mafia, podía ser acusado de asesinato a pesar de que en el fondo del asunto había la misma mezcla de codicia e ínfulas de superioridad moral que había en todas las guerras de las grandes naciones.” [ob. cit. págs. 70-71]

miércoles, 24 de agosto de 2011

PUEDE OCURRIR

El pasado día 18 de este mes de agosto leí en El País un artículo de Joaquín Estefanía: “Pentimento”, del que entresaco una cita de Keynes: Parece imposible políticamente, en una democracia capitalista, organizar el gasto público a una escala lo suficientemente grande como para llevar a cabo el gran experimento que probaría lo correcto de mis argumentos, como no sea en las condiciones creadas por una guerra”.
            Me viene al pelo esta cita para entender lo que algunos analistas apuntan como posibilidad para salir de esta situación en la que el estancamiento económico tiene que ver con el intento de recorte de los logros alcanzados en el estado del bienestar y buscar nuevos nichos de negocio en las grandes áreas de la sanidad, educación, etc.
            Un flujo de capital importante, comparable al movilizado después de la II Guerra Mundial, el aumento de la actividad económica en amplios sectores y casi comenzar desde cero en la reconstrucción de un estado del bienestar es lo que anida en algunas mentes que en ese camino la solución al escaso crecimiento económico, ya que la especulación y ataques contra algunos estados tarde o temprano dejará de surtir efecto por no dar los beneficios que se esperan. Así que puestos a imaginar, sin fumar ningún “cigarrito de la risa”, ni coger mucho sol la solución que se podría provocar sería la fomentar un conflicto bélico, limitado en cuanto al uso de armamento nuclear, en un escenario mundial con centros neurálgicos en Europa, norte de África y Asia; la neutralidad China le daría el papel de árbitro y lideraría el conflicto desde el punto de vista económico junto a los Estados Unidos. La duración limitada en el tiempo, pero con el calado suficiente para que las bajas dejaran pequeñas a las contabilizadas en la II Guerra Mundial; con una distribución geográfica más amplia, aunque Europa saldría muy tocada en este aspecto.
            Así planteado “solo” quedaría iniciar un proceso de reconstrucción, la declaración de buenas intenciones, el nunca más entre los contendientes y vuelta a empezar.
            Ah, se me olvidaba, no habrá ni vencedores, ni vencidos, solo dañados, con lo que habría una nueva división del mundo en áreas de influencia en la que las materias primas, su control, sería la justificación para mantener una industria armamentística y numerosos ejércitos que se encargarían de mantener esa “paz armada”.
            Por último las multinacionales de la salvación, cómo no, sobrevivirían al conflicto y buscarían nuevos argumentos, o a los viejos les darían una mano de barniz para seguir ocupando su puesto en este mundo.
            No es dar ideas, pero…

martes, 23 de agosto de 2011

ADIÓS BENEDICTO

Ya está, ya se ha marchado el máximo representante de esa multinacional, una de las más importantes que se dedica a ofrecer el paraíso y la salvación para la otra vida. Aquí en España su implantación es muy antigua y está arraigada, así que la presencia de su máximo representante tiene una acogida importante, al tiempo que también es controvertida, porque las iras de muchos ciudadanos se manifiesta por la amplia, dilatada y controvertida trayectoria.
            Ya se va Benedicto, jefe, y los ecos de su presencia se van apagando. Poco importa ya, lo sucedido; queda en el olvido si fueron uno o dos millones los seguidores, si follan o no con condón, si los jóvenes hacen botellón o no, si se ha gastado mucho o poco con su visita, si el gobierno se ha plegado más o menos a su presencia, si la cerviz de los adeptos a esa multinacional seguirá fuerte para mantener el peso que se les impone. En fin ya esas cosas van cayendo en el olvido, sobre todo en este agosto, no muy caluroso pero lleno de acontecimientos que ayudan a diluirse todo lo que ha sucedido con las jornadas JMJ, que no corresponden a Jóvenes Muy Jodidos, sino a otra cosa; incluso los calificativos de policía fascistas se van perdiendo y aparece cierta cordura cuando se pide que se aclaren los hechos y se pidan responsabilidades, porque hablar de policía fascista es cuando menos un exceso.
            Se ha ido, pero hay algo que queda, que no se mueve y parece que poco se va a mover en este País, en el que ahora parece que se quiere incluir en la Constitución el límite de gasto de los dineros públicos, cuando donde se debería poner es en el compromiso de los regidores público y ya debería ser suficiente. Lo que queda y parece inamovible, y que no interesa a las distintas opciones políticas es terminar con el tiempo en el horario escolar dedicado a la apología de esa multinacional. Es un caso excepcional en el mundo donde una multinacional con rango de estado tiene mediante un acuerdo entre estados capacidad para  fijar un tiempo para su promoción en el currículo escolar. La Escuela (con mayúsculas) que es el lugar para el estudio y el conocimiento racional y todo lo que tenga que ver con la dimensión humana tiene que incluir cuestiones ajenas a su función. Increíble, pero cierto.
            Si están pensando en reformar la Constitución una de los asuntos “olvidados” es el planteado, así que, sería bueno que se pusiera fin al Concordato rubricado y que de la constitución se sacara del artículo 27 el punto 3: Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”. Discutible su redacción y el lugar que ocupa, pues está dentro del derecho a la educación y “obliga”, parece, al Estado a mantener ese tiempo en el currículo dedicado a la apología de esta multinacional y al mantenimiento de la misma.
            En fin, adiós Benedicto, ven poco, por favor porque mira la que has armado y como tu presencia aviva el frentismo en este país. Me despido hasta nunca y de camino te dejo unos párrafos que hablan de la multinacional que diriges. Hago mías las palabras de César Vallejo, su autor y por eso me permito dedicarte esos párrafos y recomendarte la lectura de su libro. Sin acritud, claro.

Fernando Vallejo, La puta de Babilonia
Seix Barral

"La puta, la gran puta, la grandísima puta, la santurrona, la simoníaca, la inquisidora, la torturadora, la falsificadora, la asesina, la fea, la loca, la mala; la del Santo Oficio y el Índice de Libros Prohibidos; la de las Cruzadas y la noche de San Bartolomé; la que saqueó Constantinopla y bañó de sangre a Jesusalén; la que exterminó a los albigenses y a los veinte mil habitantes de Beziers; la que arrasó con las culturas indígenas de América; la que quemó a Sagarelli en Parma. a Juan Hus en Constanza y a Giordano Bruno en Roma; la detractora de la ciencia, la enemiga de la verdad, la adulteradora de la Historia; la perseguidora de judíos, la encendedora de hogueras, la quemadora de herejes y brujas; la estafadora de viudas, la cazadora de herencias, la vendedora de indulgencias; la que inventó a Cristoloco el rabioso y a Pedropiedra el estulto; la que promete el reino soso de los cielos y amenaza con el fuego eterno del infierno; la que amordaza la palabra y aherroja la libertad del alma; la que reprime a las demás religiones donde manda y exige libertad de culto donde no manda; la que nunca ha querido a los animales ni les ha tenido compasión; la oscurantista, la impostora, la embaucadora, la difamadora, la calumniadora, la reprimida, la represora, la mirona, la fisgona, la contumaz, la relapsa, la corrupta, la hipócrita, la parásita, la zángana; la antisemita, la esclavista, la homofóbica, la misógina; la carnívora, la carnicera, la limosnera, la tartufa, la mentirosa, la insidiosa, la traidora, la despojadora, la ladrona, la manipuladora, la depredadora, la opresora; la pérfida, la falaz, la rapaz, la felona; la aberrante, la inconsecuente, la incoherente, la absurda; la cretina, la estulta, la imbécil, la estúpida; la travestida, la mamarracha, la maricona; la autocrática, la despótica, la tiránica; la católica, la apostólica, la romana; la jesuítica, la dominica, la del Opus Dei; la concubina de Constantino, de Justiniano, de Carlomagno; la solapadora de Mussolini y de Hitler; la ramera de las rameras, la meretriz de las meretrices, la puta de Babilonia, la impune bimilenaria tiene cuentas pendientes conmigo desde mi infancia y aquí se las voy a cobrar".